domingo, 27 de septiembre de 2009

Bimbo: subterfugio para una alcaldada





Alejandro –Bimbo- Carmona fue objetado para actuar en las postrimerías del Torneo de Baloncesto Superior del Distrito Nacional con el Club Rafael Barias por disposición de la Federación Dominicana de Baloncesto (FEDOMBAL) y la Asociación de Baloncesto del Distrito Nacional (ABADINA), sin que existiera disposición alguna que avalara la decisión tomada unilateralmente por el ingeniero Frank Herasme y Manuel –Cholo- Suero, presidentes de ambas identidades.

Aquello no fue una muestra de obstinación, sectarismo, terquedad, ceguera, exclusión; fue un acto grosero, ruin y cobarde donde se pretendió beneficiar al Club San Lázaro, favorito para ganar la contienda, pero que empezaba a naufragar, donde Herasme fue jugador (con un apodo muy pintoresco); Suero, ex presidente y secretario general desde tiempos inmemorables, por demás, sub-secretario de Estado de Deportes, Educación Física y Recreación; Rafael Uribe, actual presidente de la entidad clubistica y tesorero de la institución federada; y César St. Hilaire, vice presidente de la FEDOMBAL, vinculada al más afanoso de los patrocinadores de los de Jobo Bonito. Todos involucrados en el desastre de las selecciones nacionales este verano.

En el calor de las acciones se escucharon las evasivas más hilarantes. La llave de la oficina de Herasme que nunca apareció, el vociferar de Suero como cualquier muchacho de barrio, las fabulas traídas como rábanos por las hojas y una conducta jamás pensada ante propios y extraños. No apareció la correspondencia que había enviado, supuestamente, la Federación de Baloncesto de Puerto Rico, ni el fax de los Gigantes de Carolina (equipo al que originalmente pertenece el jugador), ni las disposiciones de FIBA-Américas con el dictamen relativo a Carmona.

A la mañana siguiente Herasme abrió su oficina como todos los días, Suero continuaba como toro embravecido (pensé que requería atención médica) y ningún documento había cruzado por máquina de fax o correo electrónico desde Puerto Rico hasta las oficinas de los imputados. Néstor Rodríguez, director de elegibilidad de FIBA-Américas indicó al iniciarse la tarde que en la entidad no reposaba ninguna solicitud de impedimento contra el jugador.

El Barias descalificó primero al Club de Barrio Mejoramiento Social (BAMESO) en la cartelera de semi-fondo, tuvo que conformarse con la no inclusión de Carmona, importar otro canastero, para terminar derrotando al San Lázaro, de manera categórica y alzarse con la corona de la justa.

Toda esta encerrona se vive repitiendo en el baloncesto nacional, donde parece haber dueños de verdades, de mentiras que se pretenden convertir en veracidad. En todas las instancias se observa el síntoma de tratar de controlar los estamentos de poder, neutralizar adversos y atacar con o sin razón a todo lo que huela a oposición. Estamos observando como FEDOMBAL se convierte en horda de obsesionados que no merecen el favor ni la atención de seguidores, patrocinadores y propulsores.

Reza un dicho que: “para decir mentiras y comer pescado hay que tener cuidado”. La sed de poder de Herasme y su grupo podría costarles muy caro. Más de uno tiene la vista puesta sobre su accionar, desde hace considerable lapso. La Cámara de Cuentas de la República Dominicana ha anunciado su disposición de auditar organismos conexos y esta nación está empezando a vivir momentos de desesperanza frente a tantos corruptos.

El cambio de los estatutos de la FEDOMBAL en el 2008 es pausible de ser llevado hasta los tribunales constitucionales. Se cierran los caminos. Se obscurece la tarde. Hace aguas la embarcación. El cadáver empieza a heder. Las divisiones se asoman. Se hacen maletas.

Herasme quiso dimensionar su posición, se ocupó el que las asociaciones estuvieran bajo sus dominios, decretó para avasallar y se olvidó de lo fundamental. Debilitó la estructura del deporte del aro y el balón, llenó la institución de maulas, cambió las ordenanzas y reglamentos para ajustarlos a sus parvedades, solo para terminar arrinconado, vencido, menospreciado, asediado, despreciado, subyugado, vapuleado, acorralado.

La institución vive su momento de más hostilidad hacia los que se muestran críticos con la gestión, que ya alcanza la mayoría de la población del país, se alejan inversores para cualquiera de los escasos proyectos que pudieran existir, se trata de silenciar oposiciones. No hay dudas que FEDOMBAL está a punto de sucumbir. Nave sin marineros. ¿Cuántos de los turistas que fueron a Puerto Rico tuvieron la dignidad de acompañar a las damitas que fueron a Brasil?... ¿Cuántos de aquellos empecinados en demostrar que FEDOMBAL vive su momento de más luz?... ¿Cuántos de los mártires del baloncesto dominicano que solo viven de apropiarse de los recursos emanados de SEDEFIR?

Así como el organismo deportivo está listo para colapsar, fracasó cualquier proyecto político que trataba de encausar el señor Herasme, que no es el único con aspiraciones partidarias dentro de la institución. La selección nacional fue utilizada en esos términos por el señor St. Hilaire quien pretende volver a un nuevo periodo como sindico (alcalde) de Santiago Rodríguez. Todo hace pensar que el poder popular en mano de estos señores sería una catástrofe: intimidación, abolición de limites ciudadanos, silenciamiento de opositores y quien sabe que otras delicias más en medio de la más rampantes de las podredumbres.

Al final, sin que nadie haya dicho nada, Carmona, miembro de la selección nacional de Puerto Rico, uno de los jugadores más destacados del Torneo de Baloncesto Superior de allí, terminó jugando en Tamboril, comunidad cercana a Santiago de los Caballeros, donde se organiza un evento “superior” en el que el boricua promedió más de 40 puntos por juego, y nadie, absolutamente nadie, dijo ni esta boca es mía, ni impidió la participación del canastero. ¿Dónde fueron a parar las sanciones de la Federación de Puerto Rico?... ¿Dónde está el impedimento de FIBA?... de preguntas sobre la diafanidad, transparencia y pulcritud de Herasme, Suero, y demás allegados se podrían hacer todas.

En el catecismo todos aprendimos que Dios existía, que no dejaba oveja descarriada sin atender, en las horas que corren Herasme y su camarilla están listos para adelantar la Semana Santa del año venidero y asistir a todas las procesiones tratando de salvar el pellejo, pues cada día más se darán cuenta que ya no pueden seguir disfrutando de la increíble placidez que les ha proporcionado su desafortunado accionar.

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